Rusia: con un palmo de narices

Éstos días leíamos en la prensa que Rusia iba a buscar el apoyo de China y de sus aliados en la Organización de Cooperación de Shangay (OCS).

En la reunión con los líderes de China, Tajikistan, Uzbekistan, Kirgizstan y Kazajstan, el Presidente ruso Medveded dijo que la actuación rusa era una respuesta legítima a «la irresponsable actuación de Georgia contra Osetia del Sur».

Y añadió:

«Estamos seguros de que la posición de los mieimbros de la OCS será una respuesta internacional apropiada. Espero que sirva como una seria señal a aquellos que itentan justificar la sangrienta aventura de los líderes georgianos».

Y China y el resto de los aliados de Rusia han dado una respuesta apropiada pero de apoyo nada de nada. Han dejado a Rusia con un palmo de narices:

«Los países de la OCS expresan su grave preocupación en relación a las recientes tensiones entorno al asunto de Osetia del Sur y urgen a las partes a solventar los problemas existentes de manera pacífica, mediante el diálogo y haciendo esfuerzos para para facilitar la reconciliación y el diálogo».