En china nada es lo que parece. ¿Recuerdan a esa niña tan mona que cantó en la apertura de los Juegos Olímpicos? Pues no cantó. No, no es que la pequeña Lin Miaoke no cantara en directo y moviera solamente los labios sino que no era ni su voz la que sonaba por los altavoces de El Nido de Pájaro.
Por lo visto los organizadores han reconocido que la voz que sonaba era en realidad la de Yang Peiyi. ¿Pero por qué no salió ella a cantar su canción? Pues porque es fea. Así, tal cual. Sus dientes no están a la altura del momento cumbre de la apertura de unos Juegos Olímpicos.
Estas son las palabras de Chen Qigang, director de musical de la ceremonia:
El no haber escogido a la pequeña Yang Peiyi es principalmente debido a su apariencia, estábamos preocupados por el interés nacional
Pero no es el único momento en que la ceremonia se apartó de la realidad. Recordarán también ese impresionante travelling en helicóptero mientras estallaban los fuegos hasta llegar al estadio. Eran de mentira. Todo efectos digitales. Fuegos artificiales, nunca mejor dicho.
Y para rematar, el tema de las “cuadrillas de animadores”. Con la intención crear cierta atmosfera y evitar la embarazosa situación de que se vean espacios vacíos en las gradas, un ejército de chinos vestidos con camisetas amarillas son sentados en los espacios de los patrocinadores. Eso sí, están dispuestos a jalear a todos los contrincantes.
Es una lástima que la falta de libertad y respeto a los Derechos Humanos en China no sean también de mentira.